Los antocóridos, en la mayoría de los casos, son predadores.
Hay pocas diferencias en la biología de las ninfas y la de los adultos.
Según la especie y el clima pueden tener de 1 a 4 generaciones al año.
Las hembras suelen depositar los huevos en los tejidos de las plantas donde quedan ocultos de sus enemigos.
Son considerados insectos beneficiosos porque se alimentan de ciertas plagas.