[2] Todos los autores clásicos que la nombraron coincidieron en describirla como una ciudad muy antigua.
Con Caenina y Crustumerium, tomó las armas para vengar el rapto de las sabinas, aunque infructuosamente porque Rómulo la conquistó, trasladó a sus habitantes a Roma y fundó en su lugar una colonia.
No se encontraba entre las treinta ciudades de la Liga Latina.
Varrón dijo de ella que estaba en completa decadencia y, aunque Dionisio comentó que estaba habitada en su tiempo, según Estrabón era una mera aldea y una propiedad privada.
[2] Sin embargo, todavía se la mencionó en la Antigüedad en otras dos ocasiones: la primera en la batalla de la Puerta Colina, cuando el ala izquierda de los samnitas fue perseguido por Craso hasta Antemnas, donde se rindieron a Sila al día siguiente; la segunda, en el año 409, cuando Alarico acampó en Antemnas de camino de Roma.