Estos medicamentos actúan directamente a nivel del receptor mineralocorticoide y se usan en conjunto con otros fármacos para el tratamiento de la insuficiencia cardíaca crónica.
Se usan también para el tratamiento del hiperaldosteronismo, incluyendo el síndrome de Conn y en el hirsutismo femenino.
La aldosterona es un mineralocorticoide producido en la corteza adrenal, el cerebro, corazón y vasos sanguíneos.
Esta combinación tiende a producir una hiperpotasemia que pone en riesgo la vida del paciente.
[2] La espirinolactona tiende a producir ginecomastia, mastodinia, disminución o pérdida de la libido, disfunción eréctil y anormalidades en el ciclo menstrual, efectos que se ven reducidos en la terapia con eplerenona, un derivado de la espirinolactona.