António Egas Moniz

Si bien en los años 1930 se le veía como candidato al Premio Nobel por su invención de la angiografía, no fue hasta 1949 cuando Moniz recibió el Premio Nobel de Fisiología o Medicina (fue el primer portugués en ganar un Nobel) junto con el neurólogo suizo Walter Rudolf Hess, por otra contribución: "por el descubrimiento del valor terapéutico de la lobotomía en determinadas psicosis".Su tío y padrino, el sacerdote Caetano de Pina Resende Abreu Sá Freire, insistiría para que al apellido se le agregara Egas Moniz, en virtud de que la familia descendía en línea directa de Egas Moniz (1080-1146), el ayo del rey Alfonso I de Portugal (1109-1185).La era de la lobotomía ahora se observa generalmente como episodio bárbaro en la historia psiquiátrica.En 1938, un paciente psiquiátrico al que atendía le disparó ocho tiros, dejándolo paralítico de por vida.El paciente adujo vagamente que el doctor no le estaba dando los medicamentos adecuados para su enfermedad.