Ancrofobia, también conocida como anemofobia es un miedo extremo al viento o corrientes de aire.
[1] Esta fobia es el resultado de una experiencia traumática del pasado, es decir, no se nace con ella.
Las personas con ancrofobia suelen pensar que el viento puede matar y destruir.
Hay cuatro tipos de síntomas: psicológicos, físicos, mentales y emocionales.
La medicación generalmente tiene como pilar los antidepresivos, aunque pueden provocar efectos secundarios, la mayoría de ellos son leves y autolimitados.