Anchimallén
La palabra que describe a este ser es un vocablo que ha suscitado infinidad de discusiones, no solo por su fonética, sino por las vinculaciones con otros elementos mágicos, en relación con extraños fenómenos lumínicos en los cielos, con prácticas de brujería o incluso con el fenómeno ovni.Suelen presentarse ante las personas generalmente como "esferas de fuego", las cuales en el día se pueden ver, pero no brillan; característica que solo revelan en la noche.Así, el anchimallén actuaría como un ser benéfico, si este es criado por los mapuches para cuidar sus animales o sus bienes, defendiendo valientemente lo que cuida cuando alguien trata de robar lo que se le encomendó vigilar.En cambio, si el anchimallén actuara como un ser maléfico, se dice que estos habrían sido creados por un calcu o brujo chilote, que por diversos motivos no posee un poderoso espíritu wekufe, y requiere un sirviente sobrenatural; con el fin de utilizarlo para sus fines y convertirlos en su protectores.El Anchimallén es también conocido como Anchimayén, Anchimalén, Auchimalgén, Auchimalguén, Anchimalguén, Anchimalwén, Anchimalhuén, Anchimaluén, Chimalguén o Chimalen.