Ambroise Gardeil
En 1878 ingresa en la Orden Dominica y en 1884, acabados sus estudios, comienza a explicar De Locis Theologicis.Maestro de toda una generación de profesores dominicos de teología, que le siguieron, en 1911 abandona la enseñanza, dedicando su tiempo a madurar sus obras y a la vida apostólica.[1] Se enfrentó, primero, con el cientifismo del siglo XIX; luego, con el sentido de la «Acción» (Blondel), y después con el movimiento modernista.Su apertura final llegó a hacer pensar que se hacía «agustiniano», aunque en realidad se trataba de una lectura de san Agustín desde santo Tomás de Aquino.Su influencia no fue inmediata, sino que se ha ido evidenciando en sus discípulos.