A muy temprana edad se trasladó con su familia a vivir al sector rural de Putique (isla Quinchao), donde se nutrió de las costumbres y labores campesinas y aprendió a tocar la guitarra, participando en diferentes fiestas tradicionales en su comunidad.Fue así como se aventuró en el mundo de la música tradicional de Chiloé, donde aprovechó de recopilar historias, vivencias y trabajos folclóricos que más tarde adoptaría para mostrarlos en diferentes partes del archipiélago chilote y del país.Por razones laborales, Amador se trasladó a vivir a la localidad de Quellón, donde vivió con su familia hasta su muerte.En su labor como compositor, recopilador y folclorista creó y recopiló canciones y temas folclóricos que hoy resuenan en todo Chiloé; además creó diferentes grupos folclóricos, entre ellos el Conjunto de la isla Llingua, Conjunto Achao del Magisterio de Quinchao —con el cual grabaría un trabajo musical en 1977 siendo uno de las primeras grabaciones musicales en casete en Chiloé—, y el Conjunto Folclórico Llauquil de Quellón, entre otros, siendo estos dos últimos con los cuales recorrería diferentes escenarios del país (Entre ellos el programa de Televisión de TVN El Festival de la Una con Enrique Maluenda)[4] y plasmando su labor musical en diferentes producciones discográficas.Sus restos reposan en el Cementerio Municipal de Achao en una cripta donde están grabadas su vida y obra.
El folclorista también fue concejal y alcalde de Quellón.