Era primo hermano del conquistador Alonso de Ojeda.
[1] En 1477, cuando los Reyes Católicos llegan a Sevilla, Alonso de Ojeda expuso su opinión sobre la influencia judía y la necesidad de preservar el catolicismo.
Los monarcas ordenan al arzobispo Mendoza que reúna una junta en Sevilla para deliberar sobre las medidas a tomar.
Se resuelve primero instar a respetar el catecismo antes de aplicar medidas más contundentes contra la herejía.
[2] Finalmente, los reyes encargaron la creación de la institución de la inquisición a Ojeda en Sevilla, para extenderla luego al resto de España.