Alice Hamilton

Su carrera científica se centró en el estudio de enfermedades ocupacionales y especialmente en los efectos de metales industriales y compuestos químicos a los que estaban expuesto los trabajadores industriales.[1]​ Pasó su niñez con su familia en Fort Wayne, Indiana, donde su abuelo Allen Hamilton, un inmigrante irlandés, se había establecido en 1823.Alice creció en la propiedad familiar que abarcaba tres bloques del centro de Fort Wayne.[5]​ Montgomery Hamilton, el padre de Alice, había asistido a Princeton y Harvard.Las hermanas estuvieron siempre muy unidas, tanto en su niñez como durante sus carreras profesionales.Arthur fue el único de los hermanos en casarse aunque no tuvo ningún hijo con su esposa Mary.[10]​ Los padres de Hamilton educaron en casa a sus hijos desde una edad temprana.En el otoño de 1895, Alice y su hermana mayor Edith viajaron a Alemania.Alice planeaba estudiar bacteriología y patología siguiendo el consejo de sus profesores en Míchigan, mientras Edith buscaba estudiar a los clásicos y asistir a conferencias.[20]​ Mientras Hamilton enseñaba e investigaba en la universidad, durante el día mantenía una activa vida en Hull House, su residencia de 1897 a 1919.Cuándo la escuela médica femenina cerró en 1902, obtuvo un puesto como bacterióloga en el Instituto para Enfermedades Contagiosas, continuando con los estudios en el Instituto Pasteur en París, Francia, e investigando sobre una epidemia tifoidea en Chicago antes de centrar su investigación en enfermedades industriales.[26]​ El estudio de la medicina industrial (enfermedades relativas al trabajo) era un campo en auge porque la Revolución Industrial de finales del siglo XIX había engendrado nuevos peligros en el entorno laboral.Hamliton lideró las investigaciones de la comisión, centrada en los venenos industriales como el plomo y otras sustancias tóxicas.[28]​ También fue autora de la Encuesta de Illinois, el informe con el que la comisión documentó sus hallazgos sobre procesos industriales que exponían a trabajadores a envenenamiento por plomo y otras enfermedades.Para 1916 Hamilton era la principal autoridad en Estados Unidos en lo que a envenenamiento por plomo respectaba.Los hallazgos que realizó en este campo tuvieron una importante influencia y fueron claves para cambiar leyes y prácticas generales en pro de la salud de los trabajadores.[30]​[31]​ Durante la Primera Guerra Mundial, el Ejército de EE. UU.[33]​ Fue también miembro del Comité para la Investigación Científica de la Mortalidad por Tuberculosis en Comercios Contaminantes, cuyos esfuerzos «pusieron los cimientos para estudios ulteriores y la reforma final de la industria.» Durante los años que pasó en Hull House, Hamilton había estado activa en movimientos pacifistas y feministas.Viajó con Jane Addams y Emily Greene Balch al Congreso Internacional de Mujeres de 1915 en La Haya, donde conocieron a Aletta Jacobs, una pacifista feminista y sufragista neerlandesa.[38]​ Además, Hamilton, Addams, Jacobs y la quáquera Carolena M. Wood participaron en una misión humanitaria de ayuda a Alemania para distribuir alimentos e investigar informes de hambruna.[1]​[41]​[42]​ Atrajo significativas donaciones a Harvard mientras continuó con sus investigaciones sobre los riesgos laborales.[43]​[47]​ También criticó la educación nazi, y especialmente la formación doméstica para las niñas.Pasó los últimos años de su jubilación en Hadlyme, Connecticut, en la casa que había adquirido en 1916 con su hermana Margaret.
Alice Hamilton en 1893, al graduarse en medicina