La novela inacabada de Wallace y publicada póstumamente, El Rey Pálido, contiene un personaje llamado Chris Fogle.
[1] McNally también afirmó que esta novela «no es sólo una historia completa, sino el mejor ejemplo concreto que tenemos del estilo tardío de Wallace, donde la calma y lo plumbeo reemplazan la pirotecnia de La Broma Infinita y otras obras tempranas».
[6] El propio Wallace consideró publicar esta parte de El Rey Pálido como una obra terminada, pues era profundamente consciente de su dificultad para completar El Rey Pálido y llevarlo a una forma con la que estuviera satisfecho, y porque le preocupaba que hubiera pasado un largo período de tiempo desde su última novela, publicada en 1996.
[2][7] Según Jonathan Russel Clark, quien reseñó este libro para Los Angeles Times, McNally explica que publicó este libro para lectores no familiarizados con la obra de Wallace y su complejidad, calificándolo de «un lugar perfecto para empezar».
Éstos son los personajes que mejor escribió porque procedían de su propia experiencia".