Su padre era agricultor, pero Albert aprendió el oficio de mecánico modelador con un tío suyo y dio la vuelta a Francia para perfeccionar su formación, siguiendo la tradición de los artesanos compagnons.
En 1840, fundó junto con otros obreros el periódico L'Atelier (El Taller), que editaban con su propio dinero.
Albert y Louis Blanc intentaron desde una ventana disuadir a los asaltantes que se amontonaban en las proximidades del edificio, pero su actitud fue interpretada como de incitación a la rebeldía, por lo que fue detenido mientras Louis Blanc conseguía escapar.
Regresó a París tras la amnistía de 1859 y aceptó un modesto empleo en la compañía del gas.
Al año siguiente, dio su nombre a una calle del XIII Distrito de París.