Se mueven por posiciones alejadas del aro, pudiendo en muchas ocasiones desempeñar acciones de escolta, con los que muchas veces no se diferencian completamente, sobre todo en el baloncesto moderno.
En el baloncesto profesional, la estatura de un alero se encuentra habitualmente entre 1,96 y 2,06 metros.
Con la posesión del balón, deben ser capaces de anotar tanto desde larga distancia como penetrando a canasta, así como provocar faltas.
En la actualidad, debido a la versatilidad exigida para esta posición, existen diferentes perfiles de alero: buenos en el pase (como LeBron James[1]), anotadores (Carmelo Anthony, Kevin Durant),[2] o especialistas defensivos (Metta Sandiford-Artest[3] o Tayshaun Prince[4]).
Existen jugadores con perfil intermedio entre escolta y alero (ej.