Aleksandr Tairov

Como en la Commedia dell'Arte y el teatro hindú, utilizó el texto literario como material de trabajo y dio absoluta libertad al actor, eje del espectáculo (su eslogan fue "teatro desencadenado", aunque más bien se trata de un teatro sin trabas).El actor debía ser un "artista sintético", un virtuoso en todos los terrenos (mímica, voz, dominio del cuerpo etc).Su idea del "montaje sintético" teatraliza el teatro y subraya sus facetas fantásticas, preciosistas y espectaculares.En colaboración con los escenógrafos Aleksandra Ekster, Aleksandr Vesnín, Gueorgui Yakúlov, entre otros, estructuró el espacio escénico por medio de planos diferentes, escaleras, cubos, pirámides, plataformas que ofrecían a los actores y al director mayores posibilidades de acción.Taírov trabajó sin problemas hasta mediados de los treinta; después tuvo que adaptarse a formas teatrales más convencionales.