En los años 1917 y 1918, su pasión por el deporte lo llevó a desempeñarse como presidente del Club Huracán, donde tuvo una destacada actuación.
La política de San Juan en los años 1920 se caracterizó por las luchas internas en el radicalismo.
El conflicto latente entre las facciones radicales no se solucionaría, y mientras el gobernador Jones atacaba al radicalismo sanjuanino, desde la Legislatura se le inició juicio político al gobernador por fraude e irregularidades.
Federico salió electo gobernador de San Juan por amplia mayoría, mientras se encontraba encarcelado.
En 1927 se reformó la Constitución Provincial, incorporándose por primera vez en el país derechos sociales propios de un estado benefactor Entre sus leyes más destacadas está la del sufragio femenino, práctica que eran inexistente en nuestro país hasta ese momento.
Seis años más tarde, San Juan tendría también la primera legisladora del país, Emar Acosta.