El ají es un tipo de guiso o crema cocida de origen andino que se elabora con ají amarillo (fresco o seco)[1] y espesada con pan remojado u otra fuente de almidón.
En la cocina peruana se distingue los términos genéricos de picante y ají en cuanto a que sólo los segundos se espesan.
Entre los platillos más conocidos de los ajíes están el ají de gallina y el ají de huevos.
[2][3] También son muy valorados el ají de mondongo,[4] el ají de lacayote y el ají de mariscos.
[5] La gastronomía boliviana tiene entre sus platos tradicionales el ají de achakana, el ají de papalisa, el ají de lengua, entre otros.