Su trabajo se considera decisivo para defender la independencia finlandesa y aumentar la confianza en la fiabilidad de las armas nacionales producidas allí.
En el mismo año, compró su primera arma, un rifle Berdan, con cinco marcas que había ganado en la fábrica.
A Lahti le fascinó el mecanismo del rifle y visitó al armero local Säteri, con quien examinó el arma de cerca.
[4] Lahti cumplió su servicio militar en el regimiento central de Finlandia durante 1918 y 1919.
[5] Después de trabajar para el ferrocarril, Aimo Lahti se unió al ejército finlandés como armero principal en 1921.
Le ofrecieron un cheque por 3 millones de marcos y una comisión del cinco por ciento sobre las armas que se habrían producido en los Estados Unidos.