Agénor (hijo de Antenor)

Pertenecía a una familia muy numerosa, ya que sus padres tuvieron una docena de hijos.

Posteriormente, en la ofensiva troyana que ocupó el campamento griego para intentar quemarles los barcos, salvó la vida al príncipe Héleno cuando le ayudó a curarse una herida de guerra.

En el Libro XXI de la Ilíada, cuando Aquiles dirigía el ejército griego, Agénor fue el primero en plantarle cara, ya que pensaba que el héroe griego era un mortal más y sentía vergüenza de tenerle miedo.

Entonces, el griego se abalanzó sobre Agénor, pero en ese instante el dios Apolo hizo aparecer una espesa niebla y adoptó la forma de Agénor para despistar a Aquiles.

Agénor no sobrevivió a la guerra; fue asesinado por el hijo de Aquiles, Neoptólemo, durante el asalto a Troya la noche en la que el caballo de Troya entró en la ciudad.