Las cuchillas de afeitar deben cortar con mínima presión, y por lo tanto deben estar muy afiladas con un ángulo pequeño y perfil cóncavo, se las afila diariamente o con mayor frecuencia.
En el otro extremo, un hacha para cortar leña será menos afilada aún, y se utiliza principalmente para cortar madera mediante presión, no deslizamiento, y aunque puede rectificarse, no es común afilarla diariamente.
En general, aunque no siempre, cuanto más duro es el material menos agudo es el filo.
Las piedras consideradas de grano grueso son aquellas que poseen una granulometría de entre 200 y 500 son útiles para desgastar el filo y eliminar graves imperfecciones o para modificar el filo del instrumento mediante la quita del material.
Cabe destacar que en este punto el filo ya se encuentra preparado para realizar un corte con relativa eficacia y sus imperfecciones serán pequeñas.