En 1868 amplió su negocio abriendo otro estudio en París y comenzó a viajar por Europa realizando paisajes y edificios de los lugares que visitaba,[2] llegando a realizar panorámicas en gran formato.
Realizó numerosas exposiciones y recibió gran cantidad de premios.
[4] En 1869 fue invitado a fotografiar la inauguración del Canal de Suez, en Egipto.
Durante la guerra franco-prusiana Adolphe Braun fotografió la destrucción, especialmente de puentes.
Tras su muerte su negocio y su obra quedaron en manos de su hijo Gaston Braun.