Era hijo de un guardia civil leal a la Segunda República Española.
Adolfo Carretero estaba casado y tenía cuatro hijos.
Tras finalizar su formación universitaria, inició su carrera judicial en el año 1953, trabajando en el juzgado de la localidad alicantina de Pego.
En 1971, se trasladó a Madrid para ocupar una plaza en la Sala Primera de la Audiencia Provincial y un año más tarde, con carácter eventual, fue magistrado de las salas Tercera y Quinta del Tribunal Supremo (TS).
Como presidente, fue reelegido al año siguiente y en su cargo ante la Comisión del Tribunal de Cuentas de las Cortes, en 1993 solicitó más competencias para el órgano.