En el 30% restante de la zona C edificar no está a priori prohibido, pero cualquier tipo de construcción debe ser previamente aprobado por la Administración Civil, ya sea para viviendas particulares, estructuras agrícolas o infraestructuras.
Los planes no designan áreas para fines públicos, como escuelas u hospitales, e imponen una alta densidad de población.
La Administración Civil rara vez presenta iniciativas para el desarrollo de los pueblos palestinos ni invierte recursos en ese desarrollo, a pesar de ser el organismo responsable.
Estas áreas han sido declaradas zonas militares cerradas y están fuera del alcance de los palestinos, excepto con un permiso especial.
Por el contrario, los ciudadanos israelíes, los judíos desde cualquier parte del mundo y los turistas pueden entrar libremente.
En la mayoría de los casos, la construcción en los asentamientos fue aprobada con carácter retroactivo, o bien por orden militar.
En contraste con el planeamiento parcial y restrictiva para las comunidades palestinas en la zona C, para los asentamientos en esa misma área, se elaboraron planes detallados modernos que contaron con espacios públicos, parques o bienes comunes, y en muchos casos con baja densidad de viviendas.