Se inició en el periodismo escribiendo en las columnas de los diarios gijoneses El Noroeste y El Comercio.
En 1909 se convirtió en redactor-jefe y en 1921, ocupó la Dirección hasta 1954.
[2] En 1920 rechazó una oferta para ser nombrado redactor jefe del diario El Sol.
[3] Su obra se enmarca dentro del costumbrismo gijonés.
Se centró en los problemas sociales, económicos y urbanísticos de la ciudad.