Se considera la primera realización concreta a nivel internacional del movimiento abolicionista.
En él se establecían los mecanismos entre gobiernos para la protección de mujeres y niñas que pudieran caer en manos de traficantes que las destinaban a la prostitución y el apoyo para que una vez liberadas pudieran regresar a sus países de origen.
También establece una mayor vigilancia en torno a estaciones y puertos para evitar la trata de blancas.
El primer congreso para el tratamiento del tema se celebrará en Londres en 1899 y, en 1902, los delegados de 16 naciones se reunirán en París para discutir sobre la legislación internacional, llegándose a un acuerdo que después se firmará en mayo de 1904 y se ratificará en enero de 1905.
En 1949 en Lake Success, Nueva York, se negoció un Protocolo que modificó y actualizó los tratados de 1904 y 1910.