Este aceite se elabora tostando y prensando las pipas de la variedad local de calabaza (Cucurbita pepo var.
Se ha producido en la región de Estiria desde, al menos, el siglo XVIII.
Posee un marcado aroma a frutos secos y se puede emplear para cocinar incluso postres, pero lo más habitual es consumirlo como aliño de ensaladas.
Es un aceite rico en ácidos grasos poliinsaturados.
[2] En la medicina tradicional alemana se prescribe como remedio para infecciones del tracto intestinal y lombrices.