Piñas grandes, cilíndricas, sentadas y erectas, situadas en la parte superior de la copa.Cuando maduran, se deshacen para liberar los piñones, dejando caer al suelo unas piezas con dos escamas pegadas (tectriz y seminífera).Es en lo ornamental donde el pinsapo adquiere su mayor valor, debido a sus características estéticas de porte y color.Los bosques peninsulares de esta especie se sitúan a 900-1700 m s. n. m. (metros sobre el nivel del mar).Los pinsapares se desarrollan con todo su esplendor en las zonas de umbría, no faltando en solanas, aunque en este caso son bosques más claros.Esta especie es indiferente al sustrato, creciendo tanto en suelos calizos como serpentiníticos (de peridotitas).Actualmente, y a pesar de las condiciones climatológicas extremas para esta especie, algunos ejemplares han conseguido reproducirse, presentando un buen estado.Aunque ocupan preferentemente la umbría, hay algunos bosquetes con orientación suroeste cerca de Yebel Lakraa.australis), el rascaviejas, aladierno, durillo, madreselva, peonía, adelfilla y la leguminosa endémica del Rif Argyrocytisus battandieri.[4] Manuel Vázquez del Río publica en agosto de 1921 en la revista España Forestal (núm.Plagas y enfermedades pueden afectar a los pinsapares, especialmente en años de sequía en que los árboles sufren estrés, como ocurrió durante los años 1990, y se observó una mayor mortalidad asociada a la sequía por debajo de los 1100 m s. n. m. (metros sobre el nivel del mar).[24] En el abeto marroquí, también es el fuego la mayor amenaza, aunque también lo son la deforestación y degradación del hábitat asociadas al cultivo de Cannabis en las zonas cercanas.En 1553 aparece el primer tratado de coníferas, P. Bellonii cenomani De arboribus coniferis, resiniferis, aliis quoque nonnullis sempiterna fronde virentibus: cum earundem iconibus ad virum expressis: item de melle cedrino, cedria, agarico, resinis, & iis quae ex coniferis proficiscuntur… Su autor, Pierre Belon, dibuja y describe profusamente como árboles distintos los siguientes: cedros, enebros, thuia, sabina utraque, picea, pinus, pinaster, larix, sapinus, abies y cupressus.Las diferencias entre ellos son detalladas en el tratado de Belon, donde aparecen dibujados y descritos como árboles distintos.Según esto, la primera referencia escrita conocida del término pinsapo que aparece en el Dictionarium latino hispanicum (1492) sería inexacta.Como ejemplos de ello valgan los siguientes: Según lo anterior, no cabe duda de que, cuando Boissier describió, clasificó taxonómicamente y dio nombre a la nueva especie como Abies pinsapo Boiss, tomó el nombre vulgar con el que este árbol era conocido en la zona.