[12] Por entonces los almohades se habían apoderado ya de parte del Alto Atlas.
[13] Tras hacerse con el poder, Abd al-Mumin se dedicó a extenderlo y acabar con el enemigo almorávide.
En 1146, los almohades desembarcan en Cádiz para extenderse por la mitad sur de península ibérica, unificó las taifas para formar un gobierno islámico que pudiera hacer frente a los cristianos.
[16] Con su ayuda, proyectó construir una fortaleza, en el margen izquierdo del río Bu Regreg, frente a la ciudad de Salé.
[17] Cuando murió, en mayo del 1163,[11] en Salé, no había concluido este proyecto, que fue continuado por su sucesor, su hijo Abú Ya‘qub Yúsuf.