[3] No debe confundirse con el equipo femenino de la Società Sportiva Calcio Napoli, que actualmente sólo cuenta con las divisiones inferiores.[2] Además, ese año Maria Caramia consiguió ser la máxima goleadora de la liga con 21 tantos, mientras que Valeria Pirone llegó al tercer puesto con 18 goles.[4] Tras llegar a la máxima división italiana, el equipo se fortaleció siguiendo tres criterios: futbolistas de experiencia (Gioia Masia, Antonella Morra, Emi Yamamoto), jóvenes ya competitivas (Alessandra Barreca, ganadora del Campeonato Europeo Sub-19 con la Selección italiana, Lara Barbieri, Penelope Riboldi) y promesas (Veronica Privitera, Valentina Giacinti, Valentina Casaroli, arquero de la Selección Sub-19).[5] El equipo fue confiado al más experto Mimmo Paesano; sin embargo, a pesar de mostrar señales de recuperación bajo el nuevo técnico, el club finalizó en el decimocuarto lugar con 23 puntos, lo que llevó al descenso a la Serie B en la última fecha.[6][2] Después del descenso, futbolistas de experiencia como Valeria Pirone, Roberta Filippozzi y la capitana Valentina Esposito abandonaron al conjunto.El club decidió recomenzar en la Serie B con un proyecto basado en las jóvenes futbolistas locales, así que el técnico del equipo juvenil Alessandro Riccio fue elegido como nuevo entrenador.[7] El Napoli CF finalizó cuarto en el Grupo D. En la temporada siguiente se produjo el regreso de Valentina Esposito, tras su paréntesis en el Torres.[20] Al día siguiente, Giulia Domenichetti y Roberto Castorina fueron oficializados como nuevos entrenadores del equipo.[21] Sin embargo, el cambio en el banquillo no pudo evitar el descenso a la Serie B, que se concretó con la derrota en la última fecha, en el derbi napolitano ante el Pomigliano.