Reemplazó al obsoleto 8 mm Lebel usado durante la Primera Guerra Mundial.
Para la Primera Guerra Mundial el ejército francés se dio cuenta de que era necesario actualizar su revolucionario, pero ya obsoleto, cartucho 8 mm Lebel.
Desafortunadamente y debido a la necesidad de producir en masa el 8 mm Lebel durante dicho conflicto, no fue posible hacerlo hasta que terminó la guerra.
La más pesada Balle D fue diseñada para usarse en ametralladoras medias.
El cartucho aún está prohibido en Francia para emplearse en tiro deportivo y cacería.