En estas series se enfrentaron los dos anteriores campeones, algo que no sucedía desde las Finales de 1987.
Además por aquella época era conocida la tensión existente entre las superestrellas de los Lakers, Shaquille O'Neal y Kobe Bryant.
Ambos equipos se clasificaron para los playoffs como segundos en sus respectivas conferencias, con los Phoenix Suns líder del Oeste y Miami Heat número uno en el Este.
El siguiente rival para Detroit sería el primer clasificado Miami Heat junto con su estrella Shaquille O'Neal.
Ginóbili, famoso All-Star argentino, ahora con 4 anillos NBA, una Euroliga y una medalla de oro en los juegos Olímpicos (el único jugador de la historia con estas tres), tuvo que trabajar para ganar el que sería su segundo título NBA.
Aunque los Pistons intentaron responder al final del partido, San Antonio realizó un gran cuarto para tomar el liderazgo en las series.
Spurs lideraban la serie, 2-0 Antes de comenzar el partido, parecía que los fuertes Pistons, que sobrevivieron a dos partidos de eliminación ante Miami en las Finales del Este, volverían a rehacerse y serían un nuevo reto para los Spurs.
Spurs lideraba la serie, 2-1 De vuelta a Detroit, los Pistons tenían como objetivo remontar el déficit aprovechando los dos siguientes partidos en casa.
Cuando el partido terminó, y el marcador (96-79) final apareció en las pantallas, muchos fanes de los Pistons, lo celebraron creyendo que era posible la remontada.
El resultado fue claro desde el principio, los Pistons consiguieron establecer el récord con el menor número de pérdidas en una final, solo 4.
Los Pistons comenzaron ganando en los primeros minutos del tiempo extra, y parecía que tenía controlado el partido.
Llevó al equip en las partes finales del encuentro y su compañeros lucharon contra los nervios para conseguir la primera victoria fuera de casa.
Horry era el jugador con más campeonatos NBA en activo con un total de 5, e iba a por el sexto.
Detroit empató la serie, 3-3 El sexto partido estuvo muy ajustado, los equipos no conseguían estar arriba en el marcador durante mucho tiempo ya que la ventaja fluctuaba entre ellos.
Detroit tiró del partido ganando 80-73 a falta de cinco minutos, pero los Spurs continuaron luchando.
Aunque Duncan y Ginóbili acabaron con 21 puntos cada uno, no fueron capaces de meter miedo a unos defensivamente fuertes Pistons.
Los Pistons serían el primer equipo visitante que forzaría un séptimo partido en las Finales de la NBA.
Spurs ganó la serie, 4-3 Por primera vez en once años, las Finales de la NBA albergarían un séptimo y definitivo partido.
El partido, al igual que los dos anteriores de la serie, supuso una dura lucha durante los tres primeros cuartos.