Su pronunciación en griego antiguo era la de una t aspirada (AFI [tʰ]), que los romanos transliteraron como "th" en palabras de origen griego tales como theatrum, thalamus, thermae y Thales (palabras que luego pasaron al castellano como teatro, tálamo, termas, Tales).
Se cree que el valor fonético de la tau gallicum podría haber sido [t͡s].
En el Alfabeto Fonético Internacional (IPA), [θ] representa la fricativa dental sorda, como en el castellano de España zapato o el inglés thin.
No se debe confundir con la consonante en el inglés the, que es una fricativa dental sonora.
En la Atenas clásica, se usaba como abreviatura del griego θάνατος ( thanatos, "muerte").