Fue educado en la École Normale, y volvió allí como director en 1838, tras varios años estudiando.
Asimismo, la obra fue condenada por la Iglesia e incluida en su Índice de Libros Prohibidos en 1850.
[1] Poco después, se negó a jurar lealtad al nuevo gobierno imperial y despedido de su cargo.
Su obra Démocratie (1859) dio lugar a su persecución política y encarcelamiento.
Percibía insolubles contradicciones en cualquier modo de concebir a Dios como real; aun así, abogó por la fe religiosa, aunque el objeto de esa creencia no tuviera para él más que una existencia abstracta o imaginaria.