Se encuentra en el aceite de crotón y en varios otros productos naturales.
Es una sustancia volátil y cristalizable con un olor picante dulce caliente.
Las sales y ésteres del ácido tíglico se llaman tiglates.
Fue descubierto más adelante que era idéntico a Frankland y ácido metilcrotónico de Duppa (1865).
[3] El compuesto se demostró que era idéntico con el ácido metil-crotónico descrito anteriormente.