Ostpolitik

De hecho las tensiones y necesidades propias de la Guerra Fría hacían necesario conceder algún grado de aceptación al régimen de la Alemania Oriental (RDA), habida cuenta de que la rigidez de la Doctrina Hallstein causaba que la RFA se viera obligada a romper relaciones diplomáticas con países que reconocían a la RDA, lo cual resultaba a veces contraproducente: ya en 1957 la RFA se vio obligada a romper relaciones diplomáticas con Yugoslavia cuando el gobierno yugoslavo aceptó un embajador de la RDA; cuando en 1965 la RFA estableció relaciones diplomáticas con Israel, numerosos países árabes decidieron establecer relaciones con la RDA como represalia.También se estrecharon las relaciones comerciales con otros países de la Europa del Este (como Checoslovaquia) y con la Unión Soviética.A partir del Tratado Básico, firmado en 1972, la RFA y la RDA se reconocieron mutuamente como Estados independientes.El Acuerdo Básico consideraba que tanto la RDA como la RFA se reconocían mutuamente como Estados diferentes, establecían mutuas relaciones diplomáticas e ingresaban juntas en la ONU con escaños separados y sin pretender acaparar en exclusiva la representación de la nación alemana.Realmente en la Alemania Occidental jamás se había renunciado políticamente a la meta de unificar Alemania en un solo Estado, como lo era en 1945, aun cuando los conservadores de la RFA reconocían que semejante paso debía contar necesariamente con la aceptación previa de la Unión Soviética y los Estados Unidos.
Willy Brandt (izquierda) y Willi Stoph en Erfurt en 1970, primer encuentro entre líderes de las dos Alemanias.