Es un conocido académico de la poesía victoriana; un entusiasta del músico Bob Dylan, cuyas letras ha analizado en profundidad en un libro, Dylan's Visions of Sin.
Es un crítico feroz de aquellos escritores que considera pretenciosos (Marshall McLuhan, Christopher Norris, Geoffrey Hartman, Stanley Fish); y un cálido defensor de aquellos que piensa son más humanos o humorístico (F. R. Leavis, W. K. Wimsatt, Christina Stead).
[2][3] Hugh Kenner alabó su elocuencia, y Geoffrey Hill su "inteligencia crítica sin parangón".
[4][5] W. H. Auden describió a Ricks como "exactamente la clase de crítico que todo poeta sueña encontrar".
[6] John Carey le denomina el "crítico literario vivo más importante".