La Liga Nacional de Educación fue un movimiento político en Inglaterra y Gales que promovía la educación primaria para todos los niños, libre del control religioso. Fue fundada en 1869 y disuelta en 1877. Se desarrolló a partir de la Liga de Educación de Birmingham, cofundada en 1867 por George Dixon , miembro del Parlamento de Birmingham (MP) y ex alcalde, Joseph Chamberlain , un inconformista y futuro alcalde de Birmingham , y Jesse Collings , pero se expandió para incluir sucursales de toda Inglaterra y Gales. Dixon era presidente del consejo de la Liga, Chamberlain presidente del comité ejecutivo y Collings el secretario honorario. Otros miembros fundadores destacados (todos en Birmingham) fueron RW Dale , A. Follett Osler , JH Chamberlain , George Dawson y William Harris . Veinte miembros fundadores suscribieron £ 14,000. La primera reunión general fue en octubre de 1869, momento en el que William Dronfield de Sheffield actuaba como secretario. Se resolvió que se preparara un proyecto de ley para presentarlo al Parlamento en la próxima sesión.
La Liga se enfrentó [ ¿cuándo? ] a la oposición de la Unión Educativa Nacional de Manchester , formada por conservadores y anglicanos .
Dixon y Chamberlain eran partidarios de que se ofreciera una educación no sectaria, libre de la influencia de las iglesias. Las iglesias anglicana y católica controlaban la mayoría de las escuelas voluntarias existentes [ ¿cuándo? ] y controlaban la educación religiosa de quienes asistían a ellas. Los liberales y los disidentes querían una educación obligatoria sin doctrina religiosa.
Al final, la Ley de Educación Elemental de 1870 ( 33 y 34 Vict. c. 75), que creó las juntas escolares , fue un compromiso que llenó los vacíos del sistema voluntario. La Liga continuó haciendo campaña durante ocho años para la adopción de sus requisitos originales, antes de disolverse en 1877.
Cada uno de los documentos de la Liga incluía sus objetivos:
Objeto
El establecimiento de un sistema que garantice la educación de todos los niños del país.
Medio
- Las autoridades locales estarán obligadas por ley a garantizar que se proporcione suficiente alojamiento escolar para cada niño en su distrito.
- Los costos de fundación y mantenimiento de las escuelas que se requieran se cubrirán con impuestos locales, complementados con subvenciones gubernamentales.
- Todas las escuelas que reciben ayuda mediante tasas locales estarán bajo la gestión de las autoridades locales y sujetas a la inspección del gobierno.
- Todas las escuelas ayudadas con tasas locales serán aconfesionales.
- En todos los colegios que se beneficien de tasas locales la entrada será gratuita.
- Cuando se proporcione alojamiento escolar, el Estado o las autoridades locales tendrán la facultad de obligar a la asistencia de niños de edad adecuada que de otra manera no reciban educación.