Mateo 8:34 es un versículo en el octavo capítulo del Evangelio de Mateo en el Nuevo Testamento .
En el griego original según Westcott-Hort este versículo dice:
En la versión King James de la Biblia el texto dice:
La Nueva Versión Internacional traduce el pasaje así:
Para una colección de otras versiones, consulte BibleHub Mateo 8:34.
San Jerónimo cree que estas personas actuaron así por humildad, considerándose indignas de su presencia. Según Witham, otros, al ver la pérdida de los cerdos, tuvieron miedo, "no fuera que Cristo, siendo judío, pudiera causarles mayores daños". [1]
Hilario de Poitiers : “El hecho de que salgan a recibirle significa que los hombres están dispuestos a unirse a la fe. Los demonios, al ver que ya no hay lugar para ellos entre los gentiles, ruegan que se les permita vivir entre los herejes; éstos, atrapados por ellos, se ahogan en el mar, es decir, en los deseos mundanos, por instigaciones de los demonios, y perecen en la incredulidad del resto de los gentiles”. [2]
Beda : “O bien: Los cerdos son aquellos que se deleitan en las costumbres inmundas; pues a menos que uno viva como un cerdo, los demonios no reciben poder sobre él; o, a lo sumo, sólo para probarlo, no para destruirlo. El hecho de que los cerdos fueran arrojados de cabeza al lago significa que, cuando el pueblo de los gentiles se liberó de la condenación de los demonios, sin embargo, aquellos que no quisieron creer en Cristo, realizaron sus ritos profanos en secreto, ahogados en una curiosidad ciega y profunda. El hecho de que los que alimentaron a los cerdos huyeran y contaran lo que había sucedido significa que incluso los líderes de los malvados, aunque rehúyen la ley del cristianismo, no dejan de proclamar el maravilloso poder de Cristo. Cuando, aterrorizados, le suplican que se aparte de ellos, significan un gran número de personas que, muy satisfechos con su antigua vida, se muestran dispuestos a honrar la ley cristiana, mientras se declaran incapaces de cumplirla”. [2]
Hilario de Poitiers : "O; La ciudad es un tipo de la nación judía, que habiendo oído de las obras de Cristo sale al encuentro de su Señor, para prohibirle que se acerque a su país y ciudad; porque no han recibido el Evangelio." [2]