Jean Giraudoux

Pasó por la Escuela Normal Superior, pero se orientó muy pronto hacia la Diplomacia; licenciado en alemán en la Universidad de Múnich, fue preceptor en Baviera del príncipe de Sajonia-Meiningen y recorrió Alemania, los Países Bajos, Bélgica, Serbia y el norte de Italia; luego entró en la carrera consular.

Conoció a una joven heredera cubana, Rosalía Abreu (1886-1955), hermana de un amigo suyo, por la que sostuvo una pasión no correspondida.

Durante la Primera Guerra Mundial fue citado en la orden del día y condecorado con la Legión de honor a título militar.

Sostuvo una relación con la divorciada Suzanne Boland, que le dio un hijo, Jean-Pierre, en 1919.

Su preferencia va hacia "una inmigración escandinava eminentemente deseable" y a la exclusión de «estas razas primitivas o impermeables cuyas civilizaciones, por su mediocridad o carácter excluyente, no pueden ofrecer más que amalgamas lamentables", simbolizadas según él por los árabes.