Betty Friedan

Allí renunció a una segunda beca para seguir formándose para complacer al hombre con el que salía entonces.

[1]​ Se convirtió en ama de casa y siguió colaborando en diversas revistas.

«Había una extraña discrepancia entre la realidad de nuestras vidas como mujeres y la imagen a la que intentábamos adaptarnos, la imagen que he llamado la mística femenina», explicó Friedan en una entrevista en 2000.

[4]​ En 1971 fundó con Gloria Steinem, Bella Abzug y otras, la Asamblea Política Nacional de Mujeres (National Women's Political Caucus en inglés)[1]​ para apoyar la presencia de más mujeres en la política.

Pero es muy gratificante ver lo lejos que han llegado.»[4]​ Fueron declaraciones hechas en la presentación de su propia biografía Mi vida hasta ahora.

[2]​ "Tal y cómo lo presenta Friedan -apunta Ángeles J. Perona en su trabajo sobre el feminismo liberal estadounidense- estas mujeres eran víctimas de lo que hoy en día se denominaría la heterodesignación, es decir, una designación de su identidad que las mujeres no se habían dado a sí mismas sino que les venía ya elaborada e impuesta por otros" era aceptada con gusto por la mayoría de las mujeres dado que quienes rompían el estereotipo, señala Perona, se enfrentaban al rechazo social.

El problema se sitúa en la doble jornada y una imagen de la mujer que corresponde a la "supermujer".

[8]​ Se casó con Carl Friedan (nacido Friedman), un productor de teatro, en 1947, mientras trabajaba en News UE.

Friedan afirmó en su libro de memorias Mi vida hasta ahora (2000) que durante su matrimonio Carl la había golpeado; amigas, como la escritora y reportera Dolores Alexander recordó haber tenido que disimular los moretones a causa del abuso de Carl a tiempo para ruedas de prensa (Brownmiller 1999, p. 70).

Carl sin embargo negó el maltrato en una entrevista con la revista Time, poco después de la publicación del libro, asegurando que era "completa invención".

Más tarde Betty dijo, en el programa Good Morning America, "Casi desearía que no haber escrito sobre ello porque ha sido usado de manera sensacionalista y fuera de contexto.

[9]​ Falleció en su hogar, el día que cumplía ochenta y cinco años, por problemas cardíacos.