Bart, el soplón
Aunque los niños querían gastar el dinero, Marge los obliga a ponerlo en el banco, para luego tener intereses.En una ocasión, el niño intenta conseguir un autógrafo de Krusty el Payaso, pero el comediante no se lo da, ya que estaba apurado.Sin embargo, el cheque le es devuelto con un sello en lugar de la firma, que decía "Islas Caimán-Corporación Shore Holding".Arruinado y sin dinero, un día Bart trata de animarlo a seguir adelante, pero es ignorado.Esa misma noche, el payaso toma su viejo aeroplano y se estrella directamente contra una montaña.El payaso, sin tener escapatoria, confiesa que había fingido su muerte porque ya estaba harto de ser Krusty.En el puerto, el capitán termina una conversación telefónica diciendo «llama luego, Ismael», la frase con que comienza la novela Moby Dick.