Celebran fiestas con canciones masculinas y danzas femeninas, en las que se adornan con hojas.
El entierro de sus muertos es sencillo, pero alimentos y bebidas son colocados en la tumba.
Un muchacho busca su esposa en otra banda; cuando una muchacha lo acepta, ofrece regalos al suegro y luego celebran un banquete de bodas, tras el cual los nuevos esposos se retiran por un tiempo a la selva y luego viven con la banda de la mujer hasta tener un bebé y se trasladan luego a la banda del esposo.
La violencia es muy mal vista y muy rara vez se practica, tanto entre bandas como en las relaciones domésticas.
Pueden distinguirse: Los Jahai mantienen intercambios matrimoniales, tanto con los Lanoh y los Kintak, como también con los senoi Temiar y presentan por tanto características genéticas comunes con este grupo senoi, a pesar de que hablan un dialecto muy cercano al de los Mendriq, que genéticamente están muy relacionados con los Bateq.