Abrió su primer centro de Bikram yoga en Los Ángeles, California.
En 2012 ya existían múltiples centros de Bikram alrededor del mundo.
El acuerdo además indemnizó a Rajashree por ser responsable en responder económicamente por las demandas pendientes de su exmarido.
[13] Choudhury ha debido enfrentar varias demandas por agresión sexual, racismo y homofobia.
Una de las demandas describe el círculo íntimo de la disciplina Bikram como un culto donde miembros le ayudaban a buscar mujeres jóvenes para cometer estos delitos.
El jurado declaró que Choudhury había realizado fraude, actuado con malicia y opresión.
[20] En mayo del 2016, Choudhury regresó a India y abrió varios estudios de yoga.
[21] En octubre del 2016, su abogado declaró que Choudhury no regresará a los Estados Unidos para presentarse en los juicios pendientes y que esperaba poder testificar vía Skype.