Zaatari

Zaatari (en árabe: مخيم الزعتري) es el segundo campo de refugiados más grande del mundo.Después del incidente, el primer ministro jordano, Fayez Tarawneh, dijo que repatriarían a los refugiados implicados en los disturbios,[3]​ medida que no logró sofocar los motines, puesto que una semana más tarde, estalló otra grave revuelta cuando unos 500 refugiados, amotinados por el mismo motivo, terminó en una larga batalla campal que duró toda la noche entre la policía jordana, intentando dispersarles usando gas lacrimógeno, y refugiados que empezaron a destruir y quemar las casetas, tiendas, otro hospital de campaña y ambulancias.Debido a su gran volumen, se tuvo que planificar y construir como si fuera una ciudad.En la tabla siguiente, se muestra el primer censo oficial realizado por UNHCR de cada mes (no siempre coincide el día), a excepción del mes de julio de 2015, mes que no se llegó a realizar.La administración y organización de los servicios que se prestan a los refugiados del campamento, está a cargo del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, quienes además también se encargan del censo y apoyan a otras ONG en tareas distintas.[7]​ Desde 2012, el número de pequeños comercios ha ido aumentando exponencialmente hasta llegar a más de 23 000, todos ellos regentados por los propios refugiados, vendiendo desde ropa a comida.[4]​ Cada organización o asociación implicada, tiene delimitadas sus funciones y lugares de acción dentro del campamento con el fin de lograr la mayor eficacia para gestionar todos los servicios y paliar las necesidades más básicas como son el acceso a agua y el mantenimiento de una buena higiene, atención a las mujeres y víctimas de malos tratos, atención a los niños, atención médica, atención psicológica, atención sexual para prevención de enfermedades venéreas y ayuda a las embarazadas, atención psicológica, censo y control de los refugiados entrante y salientes, educación, proporción e instalación de equipamientos básicos que van desde tiendas de campaña a módulos prefabricados, además de camas, mantas, cocinas y hornillos entre otros equipos.
El pequeño comercio aflora dentro del campamento.
Una de las calles secundarias de distrito.