Yuri Slezkine
Saga de la Revolución rusa identifica a los bolcheviques como una “secta milenarista” que se hizo con el poder estatal.Con la excepción de los romaníes, estos pueblos mercurianos han disfrutado de grandes éxitos socioeconómicos con relación al promedio entre sus huéspedes, y tienen todos, sin excepción, apegada hostilidad y resentimiento.Un patrón de las relaciones entre los apolonios y los mercurianos es que la representación social de cada grupo por el otro es simétrica; por ejemplo, el grupo mercuriano ve al apolonio como gente bruta, mientras que estos últimos ven en los primeros un carácter afeminado.Para cultivar su separación de los apolonios, los mercurianos desarrollan una cultura de «pureza» y «mitos nacionales» que les permite proveerse de servicios internacionales (intermediarios, diplomacia) o servicios que son tabú para la cultura local apolonia (vinculados a la muerte, la magia, la sexualidad o la banca).Slezkine desarrolla esta tesis apoyándose en que los judíos, la gente con más éxito de este sector mercuriano, han ejercido una influencia creciente en el curso y la naturaleza de las sociedades occidentales, particularmente durante las fases tempranas y medias del comunismo soviético, y esa modernidad puede ser vista como una transformación de apolonios en mercurianos.