En agosto de 2004 fue lanzado un vídeo musical para el sencillo, dirigido por Chris Robinson y grabado en Nueva York.
El vídeo comienza con un hombre llamado Anthony, llegando a su piso y gritando el nombre de la cantante.
Al poco rato, este observa que hay una nota puesta en la nevera.
De repente, se enfada y derriba una mesa, siendo expulsado del bar.
El vídeo termina con Stone cantando los versos finales de la canción mientras baila en la azotea del edificio donde vive su amigo.