Poco después fue reclutado por el ejército ruso para combatir en la Segunda Guerra Mundial, donde fue hecho prisionero.
En varias ocasiones fue herido y sufrió importantes congelaciones, estando al borde de la muerte.
En 1945 fue liberado y volvió a la universidad.
En los años sesenta trabajó en Instituto de Física Teórica y Experimental, donde desarrolló el árbol AVL.
En 1962 publicó junto a Gueorgui Adelsón-Velski el artículo que lo definía.