[4] El 2 de marzo tuvo lugar un ataque suicida en la ciudad israelí de Netanya que ocasionó 30 muertos y 140 heridos, y dos días después el ejército israelí llamó a filas a 30.000 soldados en la reserva y lanzó lo que denominó como Operación Escudo Defensivo.
[7] Bakri participó en una protesta no violenta ante un puesto de control mientras se desarrollaba la Batalla de Yenín y quedó impresionado por la actuación del ejército israelí, que disparó a la multitud e hirió a un actor amigo suyo que se encontraba a su lado.
[9] Amnistía Internacional coincidió con Human Rights Watch en sus acusaciones contra el ejército israelí por crímenes de guerra.
[10] Human Rights Watch calcula que entre 53 y 56 palestinos fueron asesinados durante la ofensiva israelí, y que tan solo la mitad de ellos eran sospechosos de ser combatientes armados.
Bakri dedicó la película a su productor, Iyad Samoudi, que poco después del final del rodaje murió asesinado por soldados israelíes en al-Yamun, en la Gobernación de Yenín (Cisjordania, Palestina).
[15] Según la juez del Tribunal Supremo Dalia Dorner, "el hecho que la película incluya mentiras no es suficiente para justificar una prohibición", y utilizando una cita de Maimónides -"y con la inteligencia distinguirá el hombre entre la verdad y la falsedad"[14][20] insinuó que es cuestión de la audiencia interpretar lo que se ve.
[13] La juez rechazó el caso, dictaminando que aunque la película de hecho calumniaba a los soldados israelíes, los cinco soldados israelíes denunciantes no habían sido personalmente calumniados y, por lo tanto, no tenían derecho a denunciar.
[21] El dr. David Zangen, principal oficial médico del ejército israelí en Yenín durante la Operación Escudo Defensivo (y jefe del departamento de Endocrinología Pediátrica en el Hospital Hadassah en Jerusalén) publicó una declaración titulada Siete Mentiras Sobre Yenín, dando su opinión personal sobre su asistencia a una première privada de la película en la Cinemateca de Jerusalén.
[23] En una proyección de una película posterior en Nueva York, un espectador exaltado se enfrentó a Bakri acusándole de que Yenín, Yenín exageraba las atrocidades de la invasión israelí y presentaba un punto de vista parcial, a lo que Bakri respondió que había "visto cientos de películas que niegan e ignoran lo que le pasó a los palestinos, y sin embargo nunca me quejé ni intenté prohibir película alguna.
Además, un punto importante de la defensa contra las alegaciones por difamación es que ninguno de los denunciantes (Ofer Ben-Natan, Doron Keidar, Nir Oshri, Adam Arbiv y Yonatan Van-Kaspel) aparecen citados por su nombre o filmados en la película.