Su terreno es montañoso con amplios bosques de pinos, que cada año aumentan gracias a la falta de empresas dedicadas a la tala y sus pocas carreteras.
Es uno de los municipios más altos del país, al igual que su vecinos La Esperanza e Intibucá.
Su temperatura media anual es de 17,9 °C, lo cual hace que sea el poblado más frío del país.
Por su posición en la zona tropical el clima no presenta una oscilación muy alta entre el mes más frío y el más cálido, y la diferencia es de apenas 6 °C.
Aunque no son frecuentes, pueden darse heladas dentro del municipio con la llegada de un frente frío.