Fue linchado durante la Masacre de Centralia, luego de matar a Ben Cassagranda y Earl Watts y herir a otros en defensa propia.
Luego de luchar en la Primera Guerra Mundial, Everest trabajó en Centralia como leñador.
El resultado fue una refriega con cuatro muertos, dos de los cuales lo fueron por Everest.
Se ha dicho que Everest pronunció las siguientes palabras: "Luché por la democracia en Francia y voy a luchar por ella aquí también.
Durante la noche del 11 de noviembre de 1919, fue entregado por sus guardianes a la multitud para ser linchado brutalmente, quebrándole sus dientes a culatazos, castrándolo y linchándolo tres veces en tres localidades diferentes, siendo finalmente acribillado su cadáver a balazos y enterrado en una fosa común en las cercanías de Chehalis River.