Mouton cedió el campeonato al alemán, en la penúltima prueba del año, en Costa de Marfil.
Al año siguiente repitió participación en la prueba pero con un BMW 2002 TI y hubiese terminado segundo de no haber sido descalificado.
Al año siguiente de nuevo en la misma prueba pero con un Porsche 911 S dominó la carrera hasta que abandonó por rotura.
En el Rally Olimpia se mantuvo entre los primeros puestos teniendo de rivales a pilotos como Hannu Mikkola o Jean-Pierre Nicolas pero finalmente abandonó.
Terminó cuarto en la clasificación general del campeonato y como Ford no le aseguraba su continuidad fichó por Opel.
[4] Con Fiat participó también en varias pruebas del campeonato alemán a bordo de un Lancia Stratos -Lancia y Fiat pertenecían al mismo grupo corporativo- con el que logró las victorias en Saarland, Hunsrück, Rheinhessen y Vorderpfalz.
En la primera cita, Montecarlo logró su cuarta victoria en el mundial y en Portugal realizó una de las actuaciones más memorables del piloto en un trayectoria.
[6] En el Acrópolis fue quinto, en Argentina logró de nuevo la victoria y a partir de ahí no volvió a bajarse del podio, con un segundo en Nueva Zelanda, una victoria en San Remo y otro segundo puesto en Córcega que le dio el título matemáticamente.
En el Acrópolis fue segundo por detrás de la piloto francesa Michèle Mouton que competía con un Audi Quattro.
La francesa había perdido a su padre el día anterior por lo que no corrió concentrada y acabó abandonando por accidente.
Posteriormente fue segundo en Córcega logrando un triplete para la marca, con Alén primero y Adartico Vudafieri tercero, los tres con sendos 037.
[9] La última prueba a la que acudió fue a San Remo donde un segundo puesto y como tenía claras opciones la título el equipo le ofreció ampliar su contrato pero el alemán se negó y dejó que Hannu Mikkola con dos segundos puesto se proclamara campeón.
Las motivaciones del alemán ese año no fue defender su título y prefirió realizar las carreras en las que más cómodo se sentía.
Vuelve a ganar en Montecarlo, empatando el récord de Sandro Munari con más victorias en la prueba, con cuatro.
En 1986 disputa el Montecarlo donde fue cuarto y en Portugal se retira debido al accidente mortal donde fallecieron tres espectadores.
Ante este hecho Audi decidió retirarse del campeonato por lo que la actuación de Walter Röhrl ese año terminó ahí.
En 1987 debido a la prohibición de los grupo B, el alemán disputó tres pruebas con un Audi 200 quattro: Montecarlo, Safari y Acrópolis.
Además de los rallies, ese año participó en la subida Pikes Peak con un Audi Sport Quattro S1 preparado para la ocasión con el que ganó y batió el récord marcando un crono de 10 minutos y 48 segundos.
En 1988 participó en el Campeonato Norteamericano de la Trans-am, realizando seis carreras acompañando a Hans-Joachim Stuck y logrando dos victorias.